La poderosa Confederación Nacional de la Industria (CNI), la mayor asociación empresarial de Brasil, expresó el jueves su "extrema preocupación" con el "agravamiento de la crisis política y económica" y pidió que, en el marco de la Constitución, "se le dé un basta a este 'impasse' para que el país pueda retomar su rumbo".
La nota, difundida el mismo día en que el Congreso se propone retomar el trámite para un juicio político contra la presidenta Dilma Rousseff, dice que "los empresarios y todos los brasileños están perplejos frente al grave deterioro del escenario político, que somete al país a una situación sin precedentes en su historia". Según la CNI, "el caos en que se sumergió la política nacional ha generado un cuadro de profunda incertidumbre, que empeora todas las perspectivas de la economía, ya sacudida por la más seria recesión en 25 años".
La poderosa Confederación Nacional de la Industria (CNI), la mayor asociación empresarial de Brasil, expresó el jueves su "extrema preocupación" con el "agravamiento de la crisis política y económica" y pidió que, en el marco de la Constitución, "se le dé un basta a este 'impasse' para que el país pueda retomar su rumbo".
En un duro comunicado, la patronal de la industria afirma que ese sector clave para el desarrollo y paralizado por la crisis, "no puede aceptar que las disputas y discordias políticas se sobrepongan a los intereses mayores de la Nación" ni "seguir asistiendo el espectáculo deprimente en que se transformó la política brasileña".
La nota, difundida el mismo día en que el Congreso se propone retomar el trámite para un juicio político contra la presidenta Dilma Rousseff, dice que "los empresarios y todos los brasileños están perplejos frente al grave deterioro del escenario político, que somete al país a una situación sin precedentes en su historia".
Según la CNI, "el caos en que se sumergió la política nacional ha generado un cuadro de profunda incertidumbre, que empeora todas las perspectivas de la economía, ya sacudida por la más seria recesión en 25 años".
Asegura además que "el país está siendo duramente perjudicado por la parálisis decisoria que lo apartó del camino del crecimiento" y ha provocado un "aumento del desempleo, un alza de la inflación y el cierre de empresas".
En ese marco, sostiene que "los efectos de la actual crisis ética, política y económica han sido catastróficos para las empresas y los trabajadores" y que "ya pasó el momento de que, con respeto a los dictámenes de la ley y la Constitución, se le dé un basta a este 'impasse' para que el país pueda retomar su rumbo".
La CNI dice que "es imprescindible restablecer la gobernabilidad" y que "es fundamental restaurar la moralidad en el trato de los asuntos públicos, adoptar mejores prácticas administrativas e implantar medidas favorables a la estabilidad social, el empleo y el desarrollo".
Señala que "el sector espera que las instituciones brasileñas, y en especial el Congreso Nacional y el Supremo Tribunal, con apoyo y participación de la sociedad, consigan encontrar, con urgencia, las soluciones para sacar al país de esta crisis política y económica".
La CNI apunta que, "en este momento turbulento de la vida nacional, la industria brasileña espera grandeza, serenidad y espíritu público de los hombres y mujeres que ocupan los tres poderes de la República, para que Brasil pueda superar este escenario adverso".
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