La cantante Sophy Hernández nació en Aguadilla, pueblo que también vio nacer al mundialmente famoso Rafael Hernández. Sin embargo sus años de infancia transcurrieron en el pueblo de San Sebastián donde comenzó a mostrar su afición por el arte desde muy pequeña.
1969
En sus años de adolescente la joven inició su carrera artística en el programa de Producciones Tommy Muñiz, "La Nueva Ola", que se transmitía a través de WAPA Televisión como parte del "Show del Mediodía".
1970
A finales de la década del 60 se trasladó a la ciudad de Nueva York, donde fue contratada por el maestro Tito Puente como vocalista de su orquesta. Bajo su tutela se presentaba todas las semanas por el Canal 47 de Newark, Nueva Jersey, en el programa "Tito Puente y su mundo latino".
Con arreglos, dirección y producción del Maestro Puente, lanza al mercado, bajo el sello Tico Records, el álbum "Tito Puente presenta con orgullo.... Sophy", la cantante tomó por asalto las ondas radiales de Puerto Rico y Nueva York con su éxito "La última palabra" en el verano de 1970. Dicho tema alcanzó la posición número uno del Hit Parade. Un año después grabó junto a Tito Puente "Te reto" con el auspicio de la casa disquera Tico Records.
1972
En Puerto Rico recibió el endoso del productor cubano Gaspar Pumarejo quien le contrata con carácter de exclusividad para el Canal 4 de WAPA TV. Sin embargo, fue en 1972 cuando su carrera tomó un rumbo decisivo hacia el triunfo al firmar contrato con la compañía discográfica Velvet.
1973
Con su primer disco grabado para el sello de los hermanos Pagé, Sophy popularizó en la radio canciones como "Te apuesto", "Los Reyes Magos" y "Será, será". Pero fue en 1973 que su álbum "Yo soy mujer... y no soy una santa" la consolidó como la cantante puertorriqueña de mayor fuerza en el mercado discográfico nacional.
“En lo que marcó un récord difícil de lograr, de 12 temas incluidos en su producción, diez cortes musicales alcanzaron amplia difusión en la radio nacional. ‘Yo soy mujer...y no soy una santa' arrasó en ventas en el mercado y catapultó el tema “Canción para una esposa triste” al primer lugar de las listas de éxitos, hecho que la convirtió en 1973 en reina indiscutible del mercado discográfico del Caribe” escribió el periodista Javier Santiago en una semblanza incluida en el disco “Totalmente apasionada”, antología de sus éxitos con el sello Velvet editada por la disquera Disco Hit.
En lo sucesivo, su carrera discográfica produjo éxitos como "Hastío", "Usted ya me olvidó", "Te acordarás de mí", "Qué vas a hacer sin mí", "Me muero por estar contigo", "Despertarás llorando", "Te pido que te quedes", "Una noche por mes" y "Yo lo comprendo".
Su popularidad se evidenció en centros nocturnos, como el Club Caribe, del Hotel Caribe Hilton, y en salas de conciertos como el Teatro Tapia de San Juan. En el primero, una de las salas más cotizadas de aquel tiempo, actuó por espacio de trece temporadas consecutivas. Otras importantes plazas en la que desbordó su talento fueron la Sala de Festivales Antonio Paoli del Centro de Bellas Artes y el Hotel San Juan.
En el exterior presentó su talento como vocalista en México, Venezuela, Ecuador, Haití, y en ciudades norteamericanas como Nueva York, Miami y Chicago, donde se convirtió en ídolo de la comunidad hispanoamericana.
En una visita a Santo Domingo, donde sus discos alcanzaron gran popularidad, atrajo junto al cantante Fausto Rey, una multitud de 30,000 personas al Estadio Olímpico de la capital. En esta función, el público se mantuvo aplaudiéndola bajo una fuerte lluvia torrencial mientras Sophy les complacía con la interpretación de unas 22 canciones.
En Panamá, la intérprete puertorriqueña logró una aceptación similar con sus apasionadas canciones en el Hotel Hilton y en el Teatro Nacional. También se presentó en concierto en el Madison Square Garden y en el Carnegie Hall de la ciudad de Nueva York. El dinero recaudado en ambas presentaciones fue donado por Sophy a los niños y adultos lisiados de Puerto Rico.
Ya a finales de la década del 70, Sophy se convirtió en una de las primeras cantantes en realizar un concierto grabado y transmitido en directo por la Telecadena Pérez Perry y Venevisión de Puerto Rico, hoy día Univisión.
Dicho concierto fue dedicado a Latinoamérica y realizado en el Teatro Tapia con una orquesta de 30 profesores dirigidos por el maestro Pedro Rivera Toledo. La producción estuvo a cargo de Norma Pujals y con ella Sophy alcanzó innumerables éxitos tanto en Puerto Rico, como en Centro y Suramérica, República Dominicana y los Estados Unidos.
Al entrar la década del 80, Sophy alcanzó nuevos éxitos con la interpretación de baladas como "Vicio", "Un amante así', "Qué sabe nadie", "Todo comenzó" y "Beso a beso". En 1981 recibió un premio Billboard en Español. Un año después fue nombrada madrina del Desfile Puertorriqueño de Nueva York.
Con la idea de expandir su campo interpretativo, la artista incursionó en los géneros tropicales inicialmente con la salsa "De mujer a mujer". Grabó temas del neofolklore como "Una estrella pura" y "Palabras del ausente" de Tite Curet Alonso. El maestro Willie Colón le produjo un álbum en la onda afroantillana titulado "Sophy en Nueva York". Pero lo que sería uno de sus aciertos más importantes se dio con la grabación del tema norteamericano "The Rhythm of the Night" en versión de merengue.
"El ritmo de la noche", con letra en español del cantautor Lou Briel, le dio un éxito gigantesco en la radio y abrió una nueva caja de oportunidades para Sophy dentro de ese campo musical. Al son de la cadencia del ritmo dominicano su voz trascendió con temas como "Marinero", "Se ve y se va", "10 noviembres" y "No lo dejes caer", éste último interpretado a dúo con Johnny Ventura.
En 1987 fue reclutada por el sello CBS con quienes produjo unas cinco grabaciones. Con ellos lanzó el álbum "Sophy en portugués" y varios "remixes" de sus números de merengue editados por el programador de música (disc jockey) Pablo Flores.
Al abrir la década del 90, Sophy se desligó de Sony y se aventuró con compañías discográficas independientes. El disco "Esta soy yo" producido para el sello Farum, tuvo una tibia recepción en la radio en 1992. En medio de la proliferación de merengueras comandadas por Olga Tañón, Sophy editó el disco "Un lado aparte" en 1995 bajo el sello Combo Records.
Durante la década del 90. Con esta última producción la artista rindió homenaje a figuras como Los Ángeles Negros, Virginia López, Toña la Negra, Javier Solís, Agustín Lara, Felipe Lara, Lucho Gatica, José Feliciano, Pedro Infante, Lino Borges Roberto Yánez, Bobby Capó y Gilberto Monroig.
“Tributo a grandes voces” fue seleccionado por la Fundación Nacional para la Cultura Popular como una de las producciones más sobresalientes de 1997.
A lo largo de su fructífera carrera Sophy ha sido merecedora de cientos de premios entre los que se encuentran, además del premio Billboard de 1981, el Record World en Español a la baladista del año otorgado por la Gran Feria Anual del Disco; cinco premios ACE, y “Aplausos 92” por su incursión al género de la bachata.
Durante dicho fecundo periodo, en la República Dominicana fue invitada de honor del entonces presidente Joaquín Balaguer mientras que en Panamá fue huésped distinguida del mandatario Demetrio Lakas.
En sus viajes por el mundo hispano ha actuado en espectáculos televisivos como “El show de Don Pedro Vargas” y “La móvida de Verónica Castro” en México, “Las Noches de Andrés con Andrés Persivales” y “El show de Myrta Legrand” en Argentina, “Sábado Sensacional” en Venezuela, así como “El show de Paul Rodríguez”, “Cristina”, “Don Francisco”, “Primer Impacto”, “Despierta América” y “Mujeres Protagonistas” en los Estados Unidos.
Durante su carrera artística, Sophy ha colaborado con importantes productores y arreglistas. Entre ellos cabe mencionar a Julio Gutiérrez, autor del tema “Inolvidable”; Willy Colón, Rafael Ferro, Chucho Ferrer, Fernando Z. Maldonado y Manuel Tejada, quien fue responsable de los arreglos de temas como “No lo dejes caer”, “Al ritmo de la noche”, “Se ve y se va” y “Háblame en la cama”.
Actualmente de su discografía de 30 grabaciones, más de 20 son distribuidas en formato de discos compactos por el sello Disco Hit mientras en su más reciente producción incursiona en el ritmo de la bachata.