viernes, 19 de marzo de 2010

Brasil se coloca entre Israel e Irán

Luiz Inacio Lula da Silva es el primer presidente de Brasil que visita oficialmente Israel. Elogiado por su carisma, ímpetu y formidables capacidades de negociación –el presidente de EE.UU. Barack Obama se refiere a él como “el hombre”– Lula no se imaginó que para atraer a sus anfitriones de esta semana tendría que entrar en competencia con el profeta Abraham, ni más ni menos.
Imagen
Lula da Silva estuvo hace unos días en el Medio Oriente donde se reunión con autoridades palestinas 
 
Finalmente se mantuvo firme. No hizo concesiones. Y a diferencia del vicepresidente de EE.UU., Joseph Biden, la semana pasada, incluso se las arregló para no ser hunillado públicamente por sus anfitriones.
Los ambientes difíciles no son nada nuevo para Lula. 

El ex “gorila” de clubes nocturnos convertido en político de la línea dura, Avigdor Lieberman, ministro de Exteriores de Israel, boicoteó el discurso de Lula en la Knéset (parlamento israelí) así como la reunión de Lula con el primer ministro Benjamin Netanyahu. El motivo: Lula no visitó la tumba del fundador del sionismo 

Theodor Herzl. Pero tampoco lo hicieron el presidente de Francia Nicolas Sarkozy o el primer ministro italiano Silvio Berlusconi cuando visitaron Israel. 

Brasilia –igual que París y Roma– sabe perfectamente que no es obligatoria una visita a la tumba en los viajes presidenciales. Sin embargo un coro del Likud y de colonos de la facción sionista dura en Israel se quejó de que este hecho afectaría fatalmente el impulso del gobierno brasileño de llegar a ser un mediador en el conflicto israelí-palestino. 

Después de que lo interrogasen en la Knéset –incluido Netanyahu– por su política de no confrontación y diálogo con Irán, Lula se mantuvo firme. Condenó el Holocausto y el terrorismo; recordó a sus anfitriones la posición de Brasil y de Latinoamérica contra las armas nucleares; subrayó el “diálogo” y la “compasión” para resolver el conflicto de Oriente Próximo; defendió la solución de dos Estados viables para Israel y Palestina; pero tampoco dejó de criticar la creciente colonización de Jerusalén Este. Recibió una ovación de pie y, según algunos miembros del parlamento, “más aplausos que [el ex presidente de EE.UU.] George W Bush.” 

El profeta tropical
 
Ni siquiera con su mejor actitud abrahámica hubiera podido Lula apaciguar a sionistas y partidarios de la línea de todos los tipos. En todo caso, Lula dijo al periódico israelí Ha’aretz lo que todo protagonista serio en Oriente Próximo ya sabe: el “proceso de paz” no va a ninguna parte, y la introducción de nuevos mediadores como Brasil es el único camino. 

Y lo mismo se aplica al expediente iraní: “Los dirigentes [del mundo] con los que hablé creen que debemos actuar rápido, de otra manera Israel atacará a Irán.” Lula está convencido de que más sanciones contra Irán en relación con su programa nuclear son contraproducentes. Y esta cita va a resonar en todo el globo: “No podemos permitir que suceda en Irán lo que sucedió en Iraq. Antes de cualquier sanción, debemos emprender todos los esfuerzos posibles para tratar de construir la paz en Oriente Próximo.” 

La posición oficial del gobierno brasileño –de la que se hace eco gran parte de la comunidad internacional (es decir, no el club exclusivo de Washington y los sospechosos habituales europeos)– es que todo está todavía por negociarse con Irán respecto a su expediente nuclear.

Lula insiste: Irán tiene derecho a desarrollar un programa nuclear pacífico en términos del Tratado de No Proliferación nuclear, del cual es signatario. 

Actualmente Brasil es miembro no permanente del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas. Igual que China no apoyará nuevas sanciones impulsadas por EE.UU. contra Irán –no importa que el secretario de Defensa de EE.UU., Robert Gates, invente que EE.UU. tiene suficiente respaldo para introducir un cuarto ciclo más duro de sanciones, para las que Arabia Saudí termine de persuadir a China. China nunca votará contra su propio interés nacional de seguridad– e Irán es un asunto de seguridad nacional para China. Lula estará en Teherán en mayo y se reunirá –de nuevo– con el presidente Mahmud Ahmadineyad. Los sionistas de la línea dura están que echan humo –como era de esperar.
 

Lula sabe perfectamente que las llamadas “sanciones inteligentes” que se aplicarían sobre todo al Cuerpo de la Guardia Revolucionaria de Irán (IRGC) –a cargo de la mayor parte del poder económico y político en Irán– también afectarían a millones de civiles conectados a empresas controladas por IRGC, y por lo tanto a la población en general, que ya está pagando el precio de las actuales sanciones. El IRGC controla por lo menos 60 puertos en el Golfo Pérsico. El intento de impedir que Asia realice negocios con Irán implicaría un bloqueo naval –y eso es una declaración de guerra. 

Cómo no presionar a Irán
 
Lula ha llegado a Oriente Próximo en una coyuntura crucial –precisamente cuando el gobierno de Netanyahu ha decidido construir más asentamientos en Jerusalén Este y Cisjordania, incluso en detrimento del crucial apoyo de EE.UU. en el frente iraní.
Irónicamente Brasil logra seducir al establishment israelí en el frente económico más que en el geopolítico. Israel firmó un acuerdo de libre comercio (ALC) con el Mercosur, el quinto bloque por su tamaño en términos de producto interno bruto en el mundo –para gran disgusto de los palestinos, quienes identifican el ALC como un poderoso impulso para el complejo militar-industrial israelí.


Y esto, cuando es evidente que Brasil está estrictamente a favor de un Estado palestino viable dentro de las fronteras de 1967. Este ALC incluye una provisión estratégica crucial –permite la transferencia de tecnología de armamentos a miembros del Mercosur. Por lo tanto, armas responsables por la represión en Gaza estarán pronto disponibles en Suramérica. 

En un frente paralelo, reforzando el papel de Brasil como mediador, el presidente israelí Shimon Peres sugirió personalmente a Lula que Brasil podría hacer que dos visitas –la del presidente sirio Bashar al-Assad y de Netanyahu– coincidan en suelo brasileño. Assad va a Brasil este año y esta semana Netanyahu también aceptó una invitación. Una cumbre tropical, informal, siria-israelí podría ser ideal para romper el hielo. Lula y Netanyahu han adoptado un sistema bilateral de reuniones entre jefes de Estado y ministros importantes cada dos años. 

¿Y dónde queda EE.UU. en todo esto? Ahora existe un acuerdo estratégico oficial entre EE.UU. y Brasil, que implica dos reuniones al año al nivel de ministros de Exteriores, una en EE.UU., la otra en Brasil. El ministro de Exteriores brasileño, Celso Amorim, tiene una relación muy estrecha con la secretaria de Estado de EE.UU., Hillary Clinton. En su reciente visita a Brasil, Clinton presionó a Lula y Amorim para que apoyen sanciones más duras contra Irán. La negativa fue cortés pero firme.
Clinton sólo pudo quejarse en una conferencia de prensa de que Irán está “utilizando” a Brasil, Turquía y China para evadir sanciones. Por su parte, a Amorim siempre le gusta recordar el desastre iraquí: “Yo era embajador en la ONU durante los momentos críticos de decidir sobre Iraq. Y lo que vimos fue un gran error.” 

Lula no pudo ser más específico: “No es inteligente poner a Irán contra la pared. Quiero para Irán lo que quiero para Brasil: el uso de energía nuclear para fines pacíficos. Si Irán va más allá, entonces no estaremos de acuerdo.” Básicamente, es la misma posición que la de China.
Parecía que Lula y Obama estaban sincronizados respecto a Irán, a partir de su encuentro al margen de una reunión del Grupo de Ocho más cinco en L'Aquila, Italia, hace nueve meses. Entonces Obama animó a realizar el diálogo Brasilia-Teherán, mientras Brasil presionara a Irán para que se comprometa a un programa nuclear estrictamente civil. Es exactamente lo que Lula dijo a Ahmadineyad cuando se reunieron en Brasil. Lo que se ha endurecido sustancialmente es la posición del gobierno de Obama. 

Diplomáticos brasileños insisten en que Ahmadineyad nunca cerró la puerta a negociaciones. En discretas conversaciones diplomáticas bilaterales, funcionarios de EE.UU. incluso admiten ante sus homólogos brasileños que el propio Ahmadineyad no es inflexible, y tampoco el Líder Supremo Ayatolá Ali Jamenei. En un discurso del 19 de febrero al bautizar un destructor iraní, Jamenei volvió a desmentir que Irán quisiera armas nucleares y subrayó que son ilegales según la ley islámica porque matan a grandes cantidades de civiles inocentes. 

El problema ha sido amplificado por muchas exageraciones en los medios estadounidenses y europeos. Calmando las exigencias de sanciones, incluso Clinton en un momento de franqueza durante su viaje suramericano, se vio obligada a admitir que la adopción de sanciones podría tardar “varios meses,” si llega a tener lugar.
Incluso antes de la visita de Clinton, el ministro de exteriores de Irán, Manouchehr Mottaki, ya había admitido oficialmente ante los medios brasileños que Brasil podría ser un “puente” entre Irán y el frente de EE.UU. y la Unión Europea, debido a su posición “realista.” Mottaki no ve a Brasil como “mediador” –sino más bien “actuando para facilitar consultas,” ya que Teherán no cree que otro país deba hablar por sus propios intereses (de Teherán). 

Brasilia tampoco pidió explícitamente el papel de mediador. Mottaki ha revelado que está desarrollando una sustancial “diplomacia telefónica” con Amorim. Teherán ve obviamente los beneficios de establecer un canal de diálogo hacia Occidente industrializado a través de un importante país en desarrollo. 

El BRIC como la nueva superpotencia
 
La estrategia de Lula de tratar de posicionarse como un “puente” sería especialmente bienvenida cuando el expediente iraní llega a una etapa crucial en la que facciones de la línea dura dentro de EE.UU./UE/Israel hacen todo lo posible por descartar toda inteligencia que dude de que Irán esté construyendo una bomba nuclear; ha habido intentos sistemáticos de “amañar” inteligencia para sugerir que lo está haciendo (¿ecos de Iraq?) 

La entrada a la arena de Lula también representa otro ejemplo de la actuación del BRIC (Brasil, Rusia, India, China) como una nueva superpotencia rival de un EE.UU. “de dominación de espectro completo” cada vez más desorientado. Ninguno de los mencionados en el BRIC está a favor de un aislamiento de, para no mencionar un ataque contra, Irán. Así será mientras crean que Irán, según toda la evidencia disponible, no se acerca en nada a un arma nuclear, y un ataque inevitablemente aceleraría la proliferación nuclear en el Golfo Pérsico.


Los estados del BRIC también saben que EE.UU. e Irán pueden colaborar en problemas peliagudos –como respecto a Afganistán.
Eso deja la agenda estratégica del proverbial elefante en la habitación –Israel. De modo que es hora de que los Etados del BRIC pongan en entredicho a Israel.
Si el gobierno Netanyahu en Israel puede humillar a Obama y a Biden respecto a la expansión de los asentamientos en Jerusalén Este y Cisjordania, se puede suponer con razón que podría ignorar los alegatos del jefe del estado mayor conjunto de EE.UU., Mike Mullen, quien ha advertido que un ataque contra Irán sería “un problema grande, grande, grande para todos nosotros.” 

Puede ser que Israel (así como Washington) simplemente quiera un cambio de régimen en Irán por cualquier medio necesario. Israel puede escoger el camino nuclear –usar bombas atómicas tácticas revienta-búnkeres para destruir instalaciones nucleares iraníes. Israel puede estar dispuesto a lanzar una guerra preventiva – un elemento básico de la política israelí plenamente adoptado por el gobierno de George W Bush. E Israel ciertamente cuenta con EE.UU. para el apoyo logístico y político.
Lula no ha ido tan lejos. Pero su posición contiene el embrión de todos esos espinosos problemas con los cuales los estados del BRIC deberían enfrentar a Israel. Entonces todo el mundo sabrá quién es en realidad el que impone su política.

jueves, 18 de marzo de 2010

En sesión especial de la Cámara ministros darán a conocer diagnóstico y planes tras terremoto

La reunión está programada para este martes 23 de marzo a las 16:00 horas. Durante la discusión del Bono Marzo, el ministro Secretario General de la Presidencia, Cristián Larroulet confirmó la asistencia de los representantes del Ejecutivo. La Cámara realizará además otras sesiones especiales por este tema.



La sesión especial del martes en la tarde tiene por objeto conocer de parte del Gobierno los antecedentes recogidos respecto de la magnitud de los daños provocados por el terremoto y maremoto del pasado 27 de febrero y, especialmente, los criterios y medidas que podría implicar el plan de reconstrucción de las zonas afectadas.




Especialmente, se analizará el financiamiento; orden y seguridad pública; relaciones internacionales; gobierno interior y energía y servicios básicos; y, particularmente, en los aspectos relativos a vivienda y urbanismo, salud, educación, obras públicas, transportes, defensa nacional, economía y empleo, justicia, bienes nacionales y medio ambiente, y cultura y artes.




La Presidenta de la Cámara, diputada Alejandra Sepúlveda, especificó que los ministros “van a comenzar con una exposición extensa de cada uno de los planteamientos ante la crisis, ante la catástrofe, de parte del Ejecutivo”.




Posteriormente, la discusión de los parlamentarios será de dos horas. La bancada DC tendrá 15 minutos adicionales para introducir el tema.




Planes y Diagnósticos




Según especificó el ministro Larroulet durante la sesión del miércoles en que se aprobó el Bono Marzo, la intervención del Ejecutivo se centrará en “los planes y diagnósticos de todas las actividades que el gobierno está realizando para responder al drama de millones de chilenos que están viviendo en las zonas afectadas”.




“Estamos trabajando intensamente en resolver los problemas de la emergencia y el detalle de cada una de las medidas, para abordar los problemas de la gente que hoy día está sufriendo dramáticamente, ustedes van a tener la oportunidad de conocerlos a partir del próximo martes en la boca del ministro del Interior y de los ministros sectoriales”, aclaró.




Análisis sectorial




La diputada Sepúlveda detalló que el día jueves 25, la sesión se centrará en los temas sectoriales relacionados con la catástrofe. Además, se realizará una tercera sesión, en una fecha por definir, para analizar las zonas específicas más afectadas por la catástrofe.

miércoles, 17 de marzo de 2010

Diputado Hugo Gutiérrez calificó su nombramiento como presidente de la Comisión de Derechos Humanos como “un gran honor”

El parlamentario del Partido Comunista (PC) dijo además que esto significa para él un reconocimiento a la lucha que ha desarrollado por la defensa de los derechos humanos en Chile y adelantó que sus prioridades serán avanzar en proyectos que están pendientes como el del defensor del ciudadano.

El diputado Hugo Gutiérrez, quien fue elegido de forma unánime por sus compañeros, agradeció su designación y dijo que “este reconocimiento que me hacen todos los integrantes de esta comisión, sólo me lleva a desempeñar de manera adecuada esta labor que se me ha otorgado y espero ser digno de todo el apoyo que este día se me ha dado”.



En cuanto al trabajo en la instancia, informó que lo principal será ponerse al día en todos los proyectos que se encuentran pendientes. “Queremos saber si todo el esfuerzo colectivo que ha hecho esta comisión en anteriores periodos legislativos ha sido del todo comprendido por el Parlamento”.


En esta línea destacó el proyecto del defensor del ciudadano (boletín 6232) en donde se crea una institución que velará por el resguardo y promoción de los derechos y deberes de las personas, además de avanzar en materias de discriminación. “Son temas que me interesan mucho y también le interesa a la ciudadanía”, señaló.


Integración de la Comisión


Además del diputado Gutiérrez, la instancia quedó conformada por los diputados Gabriel Ascencio (DC); Eugenio Bauer (UDI); Fidel Espinoza (PS); Romilio Gutiérrez (UDI); María José Hoffmann (UDI); Tucapel Jiménez (PPD); Sergio Aguiló (PS); Celso Morales (UDI); Sergio Ojeda (DC); Karla Rubilar (RN); Felipe Salaberry (UDI) y Ximena Vidal (PPD).


La comisión de Derechos Humanos sesionará los miércoles de 15:30 a 18:00 horas.

lunes, 15 de marzo de 2010

Casi el 100% del suministro eléctrico se ha restablecido en Chile tras el apagón

El ministro chileno del Interior, Rodrigo Hinzpeter, aseguró hoy que dos horas después del apagón que en la noche del domingo afectó a la mayor parte del territorio chileno 'casi el cien por cien' del suministro eléctrico ya se había restablecido.

 Sin embargo, los principales problemas persisten en la sureña región del Bíobío, que fue una de las más afectadas por el terremoto del pasado 27 de febrero, de 8,8 grados en la escala de Richter, explicó Hinzpeter en declaraciones a Radio Cooperativa.

El apagón se produjo a las 20.40 hora local (23.40 GMT) y estuvo causado por una avería en un transformador del Sistema Interconectado Central, instalado en el sector de Charrúa, región del Bíobío, cerca de 600 kilómetros al sur de Santiago.

El corte afectó desde la ciudad de Taltal, en el norte, hasta la sureña isla de Chiloé, distantes entre sí unos 2.500 kilómetros.

'La zona del Biobío, que es donde estaba este transformador de 500 kilovatios instalados (...) fue la más afectada, no porque haya tenido un problema más grave, sino porque fue donde más tiempo tomó restablecer el suministro eléctrico', subrayó.

'El terremoto que tuvimos nosotros es uno de los más grandes de la historia del mundo (...) y es obvio que deje muchas estructuras dañadas y vulnerables, y ayer se produjo uno de los efectos mediatos del terremoto', indicó el ministro.

Hinzpeter explicó que después del apagón se produjo un despliegue de personal policial para mantener la seguridad en el país.

'No tenemos ningún desmán ni desorden público que lamentar hoy día, no hubo accidentes de tránsito significativos o graves', destacó el ministro, quien estimó que 'todo salió razonablemente bien'.

El apagón sí afectó a las comunicaciones de telefonía fija y celular, que ya se vieron interrumpidas tras el terremoto del 27 de febrero y también tras la fuerte réplica de 6,9 grados del pasado jueves, día en que asumió el nuevo Gobierno de Sebastián Piñera.

Al respecto, el titular del Interior apuntó que será necesario revisar el funcionamiento del servicio de telefonía celular.

'A lo mejor algunas líneas telefónicas fijas cayeron por la falta de electricidad, pero los celulares debieron seguir funcionando. Ahí tenemos una tarea pendiente, para ir poniendo al país más a tono de lo que todos los chilenos queremos', recalcó.

Hinzpeter explicó que en el momento del apagón se encontraba trabajando en el nombramiento de los gobernadores y secretarios ministeriales regionales que faltan por designar, por lo que esa tarea quedó 'inconclusa' e intentará retomarla este mismo lunes.

sábado, 13 de marzo de 2010

Los chilenos aprueban la gestión de la crisis por parte de Bachelet

Un 66 por ciento de los chilenos valora con notas de 6 ó 7 sobre 10 la gestión por parte del Gobierno de la ya ex presidenta Michelle Bachelet de la crisis abierta tras el terremoto de 8,8 grados en la escala de Ritcher que sacudió el pasado 27 de febrero la zona centro-sur del país y que causó unos 500 muertos e importantes daños materiales, frente al 17 por ciento que la valora con 4 o menos.

Un 66 por ciento de los chilenos valora con notas de 6 ó 7 sobre 10 la gestión por parte del Gobierno de la ya ex presidenta Michelle Bachelet de la crisis abierta tras el terremoto de 8,8 grados en la escala de Ritcher que sacudió el pasado 27 de febrero la zona centro-sur del país y que causó unos 500 muertos e importantes daños materiales, frente al 17 por ciento que la valora con 4 o menos.


El sondeo, elaborado por el Centro de Encuestas del diario ´La Tercera´, revela que el Gobierno de Bachelet alcanzó un 85 por ciento de aprobación en sus últimos días y que las instituciones peor valoradas son la Oficina Nacional de Emergencia del Ministerio del Interior (Onemi) y la Armada, que no emitió ningún aviso de tsunami tras el seísmo.


Aunque Bachelet se encuentra por debajo de instituciones como Bomberos, Carabineros o el Ejército en su valoración, supera a la empresa privada, a Sebastián Piñera y al propio gobierno. En tanto, un 50% considera que la ex jefa de Estado tuvo mucha o bastante responsabilidad en la tardía alerta de tsunami. Asimismo, un 54% calificó de "tardío" el envío de efectivos de las Fuerzas Armadas a la zona afectada.


Además, el 71 por ciento de los encuestados consideran que el mandato del nuevo presidente, Sebastián Piñera, será bueno o muy bueno y el 47 por ciento cree que la reconstrucción del país será el objetivo prioritario de su agenda. Más atrás quedan las promesas de su programa, como el combate a la delincuencia (15%), la pobreza (11%), la educación (9%) y el desempleo (6%). En tanto, un 55% cree que Piñera cumplirá con su anuncio de crear un millón de empleos.


Sobre las expectativas en torno a su gobierno, el 71% considera que será un gobierno bueno o muy bueno contra un 20% que cree que será regular y un 6% que será malo o muy malo.



jueves, 11 de marzo de 2010

Tres réplicas del terremoto sorprenden a Chile durante la investidura de Piñera

Tres réplicas, una de ellas la más potente desde el terremoto del pasado 27 de febrero, han sacudido este jueves la zona centro y sur de Chile mientras que el nuevo presidente del país, el conservador Sebastián Piñera, tomaba posesión de su cargo. Ninguno de los temblores ha impedido que la ceremonia se desarrollara con normalidad, pero el Congreso ha sido desalojado a su término debido a la alerta de tsunami emitida por el Servicio Hidrográfico y Oceanográfico de la Marina chilena, que ha recomendado a la población de las localidades costeras dirigirse a lugares altos.


El primer movimiento de magnitud 7,2 grados en la escala de Ritcher se ha registrado a las 11.39 hora local (15.39 hora peninsular española) a 110 kilómetros al sur de Santiago, según datos del Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS). A penas 17 minutos después, se ha registrado el otro seísmo de 6,9 grados. El último temblor ha sido de una intensidad mucho menor, 4,9 grados.


Las réplicas han coincidido con el momento en que el presidente electo, Sebastián Piñera, se disponía a jurar como nuevo jefe de Estado en una ceremonia en el puerto de Valparaíso, que ha trascurrido con normalidad, con la asistencia de varios mandatarios latinoamericanos.


La Oficina Nacional de Emergencia (Onemi) ha asegurado que, de momento, no se han reportado víctimas ni daños por estos dos seísmos.


El Servicio Hidrográfico y Oceanográfico de la Marina chilena ha emitido alerta de tsunami y recomienda a la población de las localidades costeras dirigirse a lugares altos entre las regiones de Valparaíso y Los Lagos, 1.000 kilómetros al sur de Santiago.


El primero de los terremotos de este jueves constituye la réplica más fuerte registrada del terremoto de 8,8 grados que ocurrió el pasado 27 de febrero. Según el servicio del Instituto de Geología de Estados Unidos, el epicentro estuvo en la Región de O'Higgins, a unos 200 kilómetros al sur de Santiago.

miércoles, 10 de marzo de 2010

Presidenta Bachelet: Quiero que mi gobierno sea recordado como el que apostó fuertemente a un país más justo, más solidario y más humano

La Mandataria asistió al programa "Las dos caras de La Moneda", conducido por Mario Kreutzberger, donde relevó que uno de los mayores logros de su administración fue haber construido un sistema de protección social.
En un mensaje a la ciudadanía, sostuvo que quiero "agradecer a la gente, a los chilenos que han confiado en nosotros, que han creído en nosotros, y que han entendido que hemos trabajado por ellos sin descanso y desde donde estemos lo seguiremos haciendo" .

A pocas horas de terminar su período como Jefa de Estado, la Presidenta Michelle Bachelet concedió una extensa entrevista a Mario Kreutzberger, donde repasó distintos momentos vividos en estos cuatro años de mandato.


La Mandataria dijo en el programa "Las dos caras de La Moneda", que uno de los mayores logros de su gobierno es haber sido "capaces de desarrollar un sistema de protección social que fuera desde la niñez hasta los adultos mayores y que se ha traducido en cosas concretas como una reforma a la previsión, el programa Chile Crece Contigo -que busca darle mayor igualdad a los niños- una serie de programas que buscan que las mujeres puedan tener ese espacio que se merecen, programas para los jóvenes, en Salud, en Vivienda", entre otros, los que "han buscado darle más oportunidad a todos".


En ese sentido, recordó que "un terremoto o un maremoto -como el vivido- en un país donde no existiera la red de protección que hemos logrado construir sería una catástrofe aún mayor, porque tendrían un impacto social mil veces peor".


A modo de balance, la Mandataria sostuvo que le gustaría que su período frente a La Moneda fuera recordado más que como el encabezado por la primera Presidenta mujer, como un gobierno que "apostó fuertemente a un país más justo, más solidario, más humano, para mí el tema de lo humano es fundamental".


"Son muchos más los héroes"


Sobre la experiencia de los últimos días y los efectos del terremoto que azotó al centro-sur del país, la Mandataria explicó que lo que más le ha dolido es "la gente, lo que le ha pasado, primero las pérdidas humanas, pero luego gente que dice ‘estoy viva’, pero ese sentimiento de alivio dura un poquito, porque después uno dice ‘lo he perdido todo’ y el dolor de ver personas que les costó levantar y cayeron y no saben si van a poder levantarse".


Si bien lamentó las escenas de saqueadores tras el terremoto, "yo quiero decir que son muchos más en nuestro país los héroes, las heroínas, las personas solidarias y la gente que está ahí cuando se le necesita".


En esa línea, insistió que "lo difícil para mí, lo duro, es estar todo este tiempo con tantas personas que lo han perdido todo y eso es lo que realmente a mí me deja muy consternada y muy dolida, pero por otro lado, hasta el último día trabajando a todo dar por ellos".


"Yo siempre estaré pendiente de nuestra gente, porque a mí lo que me importa es el país, y el país para mí somos nosotros, la gente", recordó.


La Presidenta Bachelet envió un mensaje de tranquilidad a los chilenos, ya que se ha estado trabajando para que se produzca un traspaso de mando "fluido" y que "ha habido toda la colaboración necesaria para que todo lo que hemos estado haciendo se siga haciendo para ir en pos de ayuda de nuestra gente".


Futuro


Consultada por sus proyectos a partir del 11 de marzo, explicó que si bien siempre ha habido "algunos planteamientos e invitaciones (…) el terremoto de alguna manera me ha hecho replantearme las opciones, así que yo espero que cuando haya algún tiempo tomar algunas decisiones y ver hacia dónde (ir), pero lo único que tengo claro es que quiero ser útil, quiero aportar, quiero ayudar con la experiencia que he tenido y el amor que le tengo a la gente".


Sobre su relación con el poder y la llamada "soledad" que experimenta la máxima autoridad del país, la Mandataria explicó que "yo escucho, pregunto, indago, estudio y luego tomo la decisión, pero al final es una la que tiene la responsabilidad y, en ese sentido, se puede decir que hay una cierta soledad, sin embargo, yo quiero decir que he contado con mis ministros y subsecretarios, con asesores, con jefes de servicios, y acá se ha formado un equipo de trabajo".


"Yo siento que aquí ha habido la capacidad de constituir una equipo humano, comprometido con la tarea, realmente dando lo mejor de sí y en ese sentido, no me he sentido nunca sola", sostuvo.


Al finalizar la entrevista, la Mandataria envió un mensaje final, señalando que quiero "agradecer a la gente, a los chilenos que han confiado en nosotros, que han creído en nosotros, y que han entendido que hemos trabajado por ellos sin descanso y desde donde estemos lo seguiremos haciendo".


Asimismo agradeció a su equipo de colaboradores por la "lealtad y el trabajo incesante, porque eso es finalmente lo que los chilenos han esperado y esperan de nosotros".